Se ofrecerá liquidar por un valor cercano a los $300. La soja contará con una ventana de 30 días y las economías regionales de noventa. Garantizarán abastecimiento y estabilidad en los precios de los productos con peso en el mercado interno.

Sergio Massa

El ministro de Economía, Sergio Massa, anunciará esta semana un tipo de cambio diferencial para las exportaciones agropecuarias. Según pudo saber Ámbito, la fecha apuntada para la oficialización de la medida es este miércoles. La ventana de liquidación será de treinta días para la soja y de noventa para las economías regionales. Apuntan a acelerar las exportaciones, fortalecer las reservas y mejorar la recaudación. Analizan nuevos cambios en el sistema de importaciones y esperan la llegada de más divisas por parte de los organismos multilaterales de crédito.

La sequía llegó para agravar el principal problema que la economía argentina arrastra desde hace tiempo, la falta de dólares. El dato que difundió la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina es elocuente: en marzo de 2023 el ingreso de divisas del agro representó u$s 1.228 millones, cuando un año antes había alcanzado más de u$s 2.802 millones.
Para morigerar el impacto de la mala cosecha, Massa anunciará esta semana un “dólar agro”. Según precisaron altas fuentes del Palacio de Hacienda a Ámbito, se trata de un tipo de cambio diferencial, que rondaría los $300. Se aplicaría para la soja, con una ventana de liquidación de treinta días y para el resto de las economías regionales por noventa días. La expectativa es que las ventas se aceleren en el segundo y tercer trimestre. Por la soja esperan “no menos de u$s 4.000 millones” y las economías regionales podrían atraer unos u$s 2.000 millones adicionales.

Luego, de una serie de reuniones entre funcionarios y las cámaras que agrupan a las empresas y productores del sector, el anuncio que encabezará el propio Massa está estipulado para este miércoles. Uno de los funcionarios que trabaja en la medida anticipó a este medio que para los sectores que tengan peso en el mercado interno se “garantizará precio y abastecimiento”. También apuntó que parte del incremental recaudado se utilizará para “compensar a los eslabones más afectados de la cadena de valor”.

Al mismo tiempo, se trabaja en cambios para las importaciones. “Queremos simplificar el esquema, hoy hay distintas percepciones y la idea es que eso vaya confluyendo hacia un mismo punto”, explicó un funcionario cercano a Massa ante la consulta de este medio, en referencia a los tipos de cambio que se establecieron por ejemplo para la contratación de artistas del extranjero o el turismo.

Metas aprobadas y más dólares en el horizonte
Durante el fin de semana, el FMI dio a conocer el reporte sobre la cuarta revisión del acuerdo, que corresponde al último trimestre del 2022 y aprobó todos los criterios cuantitativos. Esto liberó un desembolso de u$s 5.300 millones, el equivalente en Derechos Especiales de Giro, que servirán en su mayoría para pagarle de forma inmediata al propio organismo. Sólo unos u$s 2.000 millones quedarán de forma provisoria en las reservas.

De todas formas, este año Argentina debería desembolsar de forma neta unos u$s 3.000 millones, aunque fuentes del Fondo Monetario, reconocieron a Ámbito que esta es una de las cuestiones que se podrían revisar en la modificación del programa. Hasta el momento, lo concretó es que se modificará la meta de acumulación de reservas, esto incluso quedó plasmado en el comunicado oficial.

En su gira por Estados Unidos, Massa también discutió otros aspectos relevantes como un mayor control de las maniobras de sobrefacturación de importaciones y subfacturación de exportaciones, la aceleración en la quita de subsidios energéticos para los hogares de altos ingresos y la aplicación de políticas de ingresos, como el programa Precios Justos.

Con la coyuntura actual, uno de los puntos más relevantes que se lleva el Gobierno es el compromiso por parte de la Casa Blanca de apoyar de forma decidida a Argentina en los organismos multilaterales de crédito. Según pudo saber Ámbito, esto implicaría que se aceleren desembolsos del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo y de la Corporación Andina de Fomento y que ingresen antes del 30 de junio más de u$s 3.000 millones por esa vía.

En el equipo económico todos hacen números. Al margen de la llegada de divisas por las medidas que se anunciarán, anotan como ahorro unos u$s 4.000 millones en importaciones de energía, por el impacto del gasoducto Néstor Kirchner y por excedentes que se estiman para esta temporada. Cada dólar cuenta.

Fuente: ambito.com